Esta web usa cookies para mejorar tu experiencia de usuario. Si continúas entendemos que das tu consentimiento. Leer más.

Muchas veces se ha escuchado la frase: "vaya, si hubiera registrado dominios cuando salieron o en los inicios, hoy sería rico".

Pero, ¿es esto así de fácil?. Ciertamente no.

En 1995, registrar un dominio costaba 100$ por dos años en Network Solutions. Hoy día renovar un portfaolio de 1.000 dominios cuesta unos 9.000$, pero entonces eran 100.000$. Y habría que haber renovado los dominios premium muchas veces antes de que alcanzaran el valor que hoy tienen.

Todavía quedaban 4 años para el despegue de Internet con la tarifa plana de 1.999, a unas velocidades que hoy día son ridículas.

Rick Schwartz, con su filosofía de probar, probar y probar,  tuvo la fortuna de entrar en el mundo de los dominios de una manera insospechada:

En Mayo de 1993 por primera vez los números de teléfono eran portables. Tú podías registrar o hacerte con tu propio número 800. No hay el control actual. Podías llamar a MCI o AT&T para obtener tu número y lo conseguías. Podías llamarles miles de veces si querías. Yo lo hice para las empresas que tenía entonces.

Quería esos números para el marketing en radio y televisión ya que era más fácil recordar 1-800-Hampton que 8 o 10 dígitos. Si llamaba a 1-800-Motorola, Motorola podría responder. Mientras viajaba sólo llamaba a hoteles que me sabía el número como 1-800-Marriot, 1-800-DaysInn, 1-800-HoldayInn. Esto me demostró su potencial. Probé a llamar a "números sucios". Y no fallaba, cada vez salía una sensual voz pidiendo 5$ por minuto. Esto era interesante, así que registré unos cuantos: 1-800-makeout, 1-800-sirlove, 1-800-formytits y cosas así.

Durante el primer mes gané 650$ con ellos. Así que cada día me entretenía viendo cuánto habían generado el día anterior. Aún hoy reciben llamadas y cada semana recibo mi cheque.

Me pregunté entonces, ¿qué sé de este nuevo negocio?. Empecé a comprar todas las revistas del mercado. ¿De qué va esto? Publicidad. Puse un anuncio de mis números en todas las revistas. Gastando entre 1.000$ y 2.000$ al mes ganaba con los números unos 20.000$ al mes. Y entonces conocí Internet.

Cuando surgieron los números 888 compré mejores números que los que tenía en 800, porque al juego de los 888 había llegado al principio. Ahora tengo unos 350 números.

Esta es la diferencia entre la sociedad de ahora y la de hace 50 o 100 años: fuentes de ingresos frente a trabajo único.

Ahora si quiero incrementar el beneficio basta con poner unos de los números en alguna web mía. Publicidad online. Hice el experimento hace unos años con lipservice.com y el incremento del beneficio superaba los 39,95$ del hosting mensual (lipservice.com fue su primer dominio el 27 de Diciembre de 1995 y le costó 100$: Los dominios .com costaban por aquella época $50 al año y había que registrarlos por un periodo mínimo de dos años. Se dijo a sí mismo que si podía obtener un beneficio de 50$ al año con un dominio habría un futuro en ese negocio de Internet. Él puso uno de sus números 1-800 que no recibía demasiadas llamadas en una web a ver qué pasaba. Durante el primer mes que hizo esto, ganó 59$.).

Hice cosas proactivas como postear en los foros de AOL y en otros sitios. Pero sólo durante un par de meses. Luego empecé a conseguir dominios.

Mi primer año fue el más oscuro. Me sentía completamente sólo aunque sabía que no lo estaba. Internet era poca más que un páramo "en construcción" y se empezaban a ver los primeros modelos de webs. Había otros domainers y todos ibamos a las mismas vetas de la montaña. No había mucha gente que se dedicara a esto a tiempo completo, quizás unas 12 personas. En aquellos días lo único que me motivaba a seguir adelante era perder un dominio por un día o dos. A 100$ por dominio, el coleccionismo se convirtió en algo caro rápidamente. Pero yo creía en lo que estaba haciendo y no podía pararme. Era como una enfermedad. Estaba enganchado. Todo el día… y toda la noche. En Noviembre de 1996 ya había registrado mis primeros 300 dominios. Todos para adultos y todos apuntando al mismo sitio , un "truco" que por aquel entonces pocos sabían que se podía hacer.

En aquel momento no recibía dinero de los dominios pero había decidido registrar más. Iba a registrar 18 dominios gastándome 1.800$. Y unas semanas más tarde registré otros 12 o 15, no recuerdo exactamente. Y luego más, era una pequeña adicción. Probablemente haya sido el primer adicto al registro de dominios del mundo.

Tenía ya unos 1.000 dominios y Network Solutions ni siquiera me había enviado la factura por el primero. Empecé a registrar en Mayo y hasta Octubre no recibí la primera factura. No recordaba siquiera si tenía esos dominios. Por aquel entonces una empresa de Pennsylvania decía que podía redireccionar todos tus dominios a un único sitio. Excelente. Ahora empezaban a dar dinero y pagaban las facturas.

Un tipo me enseñó a redireccionar dominios sin tener que depender de un ISP. Ya podía sentarme y probar y probar lo que había aprendido en los últimos meses (En marzo de 1997 aprendí a usar ftp y a modificar una página web. Ese día cambió mi vida y mi destino.).

Yo era una granja de banners. Yo y Steve Cohen. Yo tenía entre otros Porno.com y Steve Sex.com (La historia de Sex.com en 10 capítulos). Todo el mundo se reía de él. Todo el mundo se reía de mí. No tenía conocimientos técnicos, no sabía cómo hacer una web. Todo lo que hacía era copiar y pegar. Aquí tengo un banner, copia, pega y a otra cosa.

Contacté con el propietario de porno.com. La semana anterior se lo había vendido a un chaval por 5.000$. Le ofrecí al chaval 10.000$ y me dijo que no. Unos días más tarde le ofrecí 15.000$ y dijo que no. Le dije que le compraría un coche Firebird valorado en 25.000$ y tampoco. Al final el trato fue 15.000$ en metálico y 27.000$ en 12 cuotas mensuales, durante las cuales el tendría la propiedad del dominio. No volví a saber de él, realmente ni siquiera sabía quien era.

Todo el mundo de la industria para adultos pensaba que me había vuelto chalado. Pagar 42.000$ por un dominio en el que ellos no gastarían ni 100$ si estuviera libre.

Yo pagué el dominio con los ingresos de 6 semanas (Porno.com llegó a hacer más de 1 millón de dólares sólo con los banners que Rick le colocaba).

No gasté nada. El dominio lo pagó todo y no en años, en 6 semanas. Antes de porno.com gestioné la operación para comprar Ass.com. Fue más delicada. El dominio pertenecía a una empresa de herramientas ubicada en Berlín. Querían 12.500$. Y creeme, si en aquellos días hubiera perdido 12.500$ lo hubiera pasado mal, no podíapermitirme pérdidas así. Por otro lado tampoco podía permitirme perder un dominio como Ass.com. Envié el dinero a Alemania y estuve casi sin dormir 72 horas. Tres días de nervios hasta que el domino me fue transferido. Y ese fue otro gran día.

No creo que en aquel punto supiera como monetizar el dominio. En aquellos momentos la gente del foro estaba haciendo por cada 10 clicks 1 céntimo de dólar. Yo conseguía 10 céntimos por click. Había conseguido bastante tráfico. Esto me llevó al foro ynot para abril de 1997. Un lugar que cambió mi vida y que, afortunadamente, también lo hizo con la de muchos otros. Había unos pocos genios allí y gente muy astuta. Gente que cuando yo iba, ellos ya estaban de vuelta. Yo me sentía insignificante entre ellos. Pero yo tenía algo que poner en la mesa, el tráfico más potente que jamás habían visto. La primera vez que uno de ellos me llamó webmaster, sentí como si yo hubiera rebajado la categoría de los webmasters al no tener yo ninguna de las habilidades que un webmaster debería tener. Mi lema era "Si puedes cortar y pegar, entonces lo puedes hacer".

¿Por qué no tenía empleados trabajando todo el tiempo para construir y mantener nuevas webs? Para mí hubiera sido una distracción. Estaba en una encrucijada única en mi vida yo queria centrarme en los dominios. Era más importante ir por caminos por lo que nunca nadie había ido que pararme e invertir mi tiempo en caminos ya transitados. Además yo entendía que los desarrollos serían cada vez más baratos a medida que pasara el tiempo. Mi mejor opción era moverme de manera pausada con los desarrollos y como una pantera a la hora de obtener los dominios a desarrollar..

Además yo tenía un enfoque diferente, tenía tráfico type-in. Era como un fontanero. Tenía tráfico. Sólo me tenía que preocupar de donde llevarlo.

Mi tráfico era cualificado. Cualquiera que escribe porno.com, dick.com o ass.com está buscando algo específico. Hoy día verás a mucha gente enredando con los motores de búsqueda, spameando, etc para conseguir tráfico. Tráfico que es basura.

A finales de los 90 Schwartz empezó a compartir su conocimiento de manera pública. Sabía que eso era un arma de doble filo, podría perjudicarlo o beneficiarlo. Quería hacer todo lo que estuviera en su mano para acelerar la comprension y aceptación de los dominios, lo cual podría revalorizarlos. Montó uno de los primeros foros de la industría, habló con periodistas, organizó encuentros con domainers. Compartió lo que sabía, pero durante el proceso también recopiló información para sí mismo. El embrión de las conferencias T.R.A.F.F.I.C. de hoy día fueron las reuniones que Schwartz hacía en la cocina de su casa. El interés creció y trasladaron el lugar de encuentro al hotel Delray Beach Marriott.

Han dejado 1 comentario...

Avatar

noel

7 de octubre de 2013 at 11:28

Interesantisimo articulo, realmente mas de uno hemos hecho ese comentario y no se si seria mas facil ser domainer antaño …o ahora…

¿Quieres dejar tu comentario?